La Guía Máxima Carpincho: Conductores limeños

A pesar de tener pocos años manejando, he llegado a identificar diversos tipos de conductores en la ciudad de Lima, la mayoría idiota, pues suelen causar los peores embotellamientos de la ciudad. He aquí las diferentes clases:

“El religioso”: Es aquel conductor que sabe que NO HAY FORMA que su auto suba un cerro como el de la Molina o el de chorrillos, pero aún así lo intenta, pues espera un milagro. El auto no circula a más de 10 kilómetros por hora en su ascenso. De la misma manera, espera que su dios le haga un milagro y gane la selección peruana de fútbol.

“El turista”: Es aquel que quiere prestar atención a cada casa que hay en la ciudad, como si no las viera todos los días, pues no suele circular a más de 40 kilómetros por hora. Parece que tampoco se aprendió el reglamento, pues suele circular por el carril izquierdo.

“La Bestia”: Es aquel que hace lo que sea para pasarse la luz ámbar, como por ejemplo pasar sobre un sardinel reventando 2 de sus llantas. Caballero, la cagaste.

“El piña”: Es aquel al que se le malogró el carro en el peor sitio posible (una rampa de salida, el carril central de una carretera, un puente, etc.)

“El apurado”: Es aquel que usa el carril de “solo voltear” para seguir de frente, o un carril que es para seguir de frente, para voltear, pues busca siempre adelantar a tantos autos como le sea posible para avanzar más rápido, como intentando meterse a una salida adelantando varios carros por un lugar por el que no se debe salir. Suele causar embotellamientos al generar una cola de autos porque busca voltear por un carril por donde no se debe.

“El pobre”: Es aquel que maneja una cosa que nadie se explica como diablos sigue avanzando. Una reliquia que debería estar en un museo.

“El suicida”: Es aquel que estando en una vía que no es preferencial, espera a que estés entre 10 y 5 metros de él (o ella) para atravesarse en tu camino.

“El profesional”: Es aquel que se cree chofer de combi o taxista. Para donde se le da la gana y no le importa que el semáforo este en verde, él igual se detiene.

“El jalado en física”: Es aquel que no entendió que para ADELANTAR a otro vehículo hay que IR MÁS RÁPIDO QUE EL. Suele circular junto a otro vehículo sin rezagarse ni adelantarlo.

“El nervioso”: Es aquel que por cualquier cosa te toca el claxon. Nunca entendió que para cerrar a otro vehículo y causar un choque, se DEBE IR MÁS LENTO QUE EL.

“El vejete”: Es aquel que aprendió a manejar cuando los autos no tenían espejos, pues no es conciente de su existencia. No los suele mirar en absoluto para cambiar de carril.

“El ciego”: Es aquel que no sabe que hay líneas que dividen los carriles en una vía. Suele circular por 2 a la vez y a una velocidad no mayor de 40 kilómetros por hora.

“El millonario”: Es aquel a quien lo le importa que le pongan una multa, va a voltear donde está prohibido aún cuando haya un policía cerca.

Hasta este punto, son los únicos que recuerdo. Si me acordara de más, los agregaría.